Cuba reabre embajada en Washington D.C.

Por Goldy Levy 7/23/2015

A Cuban Flag in the back of a Taxi. Havana (La Habana), Cuba

Este Lunes Estados Unidos y Cuba dieron un paso oficial hacia el restablecimiento de sus relaciones diplomáticas, que se encontraban anuladas desde 1961. Esto viene después de que ambos países anunciaran el descongelamiento de las relaciones en diciembre del pasado año.

Después de 54 años, la bandera cubana fue izada este 20 de Julio frente a el edificio que fue la ‘Sección de Intereses de Cuba’ y que ahora se convierte en la embajada de Cuba. La bandera fue la misma removida hace más de 5 décadas, pues una familia cubana residente de Miami, la conservó en su hogar.

Para celebrar el suceso, una delegación de diplomáticos cubanos, artistas y veteranos de la revolución viajaron a la capital de Estados Unidos. Y como era de esperarse, también asistieron opositores al evento, cubanos y americanos, quienes protestaban que el restablecimiento de relaciones con la revolución cubana era un error. Incluso un activista cubano que impregnó su camiseta de pintura color rojo, representando la sangre cubana, fue detenido por oficiales de la policía.

Al mismo tiempo, diplomáticos Americanos en Cuba ya están listos para comenzar a trabajar y esperan la llegada del secretario de Estado John Kerry, quien inaugurará la nueva embajada el próximo 14 de agosto. Este será el primer viaje que un oficial estadounidense de su rango hace a Cuba desde 1959.

Por ahora, los jefes de Sectores de Interés en cada país tomarán el papel de líderes hasta que se nombren los nuevos embajadores. Estos Sectores de Interés fueron establecidos en 1977, durante un breve periodo de mejoramiento de las relaciones en la administración de Carter.

Este suceso es sumamente importante, pero es tan solo el principio de la normalización entre la relación de los dos países. Han sido más de cinco décadas de problemas y rencores acumulados entre las naciones, y será un proceso complejo. Ambos países tienen prioridades que exigen a sus contrapartes, Washington pide la mejora de los derechos humanos en la isla, mientras La Habana quiere que se ponga un fin al embargo estadounidense.